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La comida que se sirve en Mux es un reflejo de la cocina tradicional viva de México, de historias cotidianas y de sabores originales.
La cocina mexicana es mucho más que una sucesión de sabores deliciosos, es un mosaico que refleja la diversidad cultural de todo el país. Cada región cuenta su propia historia a través de ingredientes autóctonos, técnicas culinarias únicas y rituales que han pasado de generación en generación.
En este vibrante escenario gastronómico, la chef Diana López del Río, socia fundadora del restaurante Mux, se ha embarcado en la misión de preservar esta riqueza culinaria.
Mux: un “Punto Sagrado” para la tradición mexicana
Ubicado en el corazón de la cocina tradicional, Mux, que significa “punto sagrado” en mam, un idioma derivado del maya, se destaca como un faro de autenticidad y preservación.
El propósito fundamental de este restaurante es registrar y mantener vivos los conocimientos culinarios arraigados en la cotidianidad de la sociedad mexicana. Su compromiso es sostener y salvaguardar la tradición y los recursos que la alimentan.
Cocina en constante transformación
Lo que distingue a Mux es su enfoque no lineal hacia la cocina. A diferencia de muchos establecimientos, la propuesta culinaria de este restaurante cambia temporalmente.
Cada año, la chef Diana López del Río emprende viajes de investigación a diferentes regiones de México. Durante estas expediciones, se sumerge en la autenticidad de las cocinas tradicionales, convive con cocineras locales y absorbe la esencia de los ingredientes y el contexto cultural que rodea a cada platillo típico.
Al regresar de estas travesías, los conocimientos adquiridos se plasman directamente en el menú de Mux. Desde su fundación, este restaurante ha presentado tres cartas distintas, cada una inspirada en una región diferente de México.
Lagos de Moreno en Jalisco, Tulpetlac en Ecatepec y la más reciente de Malinalco, en el Estado de México, han sido las musas culinarias que han dado vida a estas propuestas gastronómicas.
Próximo destino: Tabasco
Con tres regiones exploradas y una mirada puesta en el futuro, la próxima expedición de Diana López del Río la llevará a Tabasco.
Su enfoque es mantener cierto misterio en torno a sus viajes de investigación: “cuando hago los viajes de investigación la idea es no estar tan informada sobre lo que haré porque siento que no es igual al momento de aprender”.
La espiritualidad en la cocina tradicional mexicana
El interés de Diana por la cocina de investigación se originó en su conexión con la espiritualidad. Reconoce que la cocina mexicana tradicional está impregnada de espiritualidad, con creencias y festividades únicas.
La chef destaca la importancia de valorar la riqueza de la propia cultura, en un país donde a veces se subestima lo local en comparación con otras culturas.
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Más que un menú: narrativas culinarias
En Mux, el objetivo va más allá de presentar platillos deliciosos. Cada elemento en el menú es un acto de admiración hacia los lugares y las personas que generosamente comparten sus costumbres y sabores.
La chef comparte historias que se entrelazan con las recetas, convirtiendo el menú en un legajo que cuenta las experiencias y vivencias de las cocineras locales.
Sin embargo, compartir estas historias no siempre resulta fácil. Diana reconoce que integrar el contexto social y cultural en la experiencia gastronómica es algo que depende en gran medida del interés individual de cada comensal.
Desafíos y recompensas en la búsqueda del sabor auténtico
A pesar de la dificultad de igualar los sabores de las regiones que visita, la esencia de cada experiencia perdura. Los ingredientes pueden variar, las hierbas pueden ser menos aromáticas, pero la conexión entre regiones, historias y la cotidianidad de la sociedad se mantiene.
Los viajes anuales de la chef se convierten así en una forma única de conectar diferentes partes de México a través de la gastronomía.
En resumen, Mux no solo ofrece una experiencia culinaria exquisita, sino que también sirve como un portal a la riquísima diversidad de la cocina mexicana. A través de sus cartas rotativas y viajes anuales de exploración, este restaurante se erige como un defensor apasionado de la preservación de las tradiciones culinarias que hacen de la cocina mexicana un tesoro invaluable.
En Mux, cada platillo es una celebración, cada historia es un tributo y cada bocado es un viaje a la esencia misma de México. ¡Descúbrelo en cada visita!
