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Además de presentar una nutrida oferta de destinos turísticos inolvidables, Booking.com comparte los verdaderos destinos detrás de las comidas favoritas de muchos.
Una de las motivaciones principales para viajar a un destino es probar la comida local y es una razón que han manifestado alrededor del 90 por ciento de la comunidad viajera mexicana.
De acuerdo con una investigación realizada por Booking.com, en enero de este año, la comunidad viajera está especialmente emocionada en probar nuevos platillos este verano, después de más de dos años resguardados por condiciones de pandemia.
Los resultados de dicha investigación revelan que el 58 por ciento de los viajeros planean comer y beber de todo en sus vacaciones de este verano.
Aunque el origen de algunos platillos favoritos de muchos puede ser obvio, a menudo estos pueden ser engañosos y para facilitar las experiencias gastronómicas, Booking.com comparte los orígenes de cuatro comidas favoritas por las que vale la pena viajar.
Barriga llena, corazón contento
Taco al pastor – Líbano, Medio Oriente
Uno de los platillos más emblemáticos e importantes de México como el taco al pastor, no es cien por ciento de origen mexicano. De acuerdo con diversos libros de historia, el taco al pastor es una tropicalización del taco árabe que es de origen libanés.
Tradicionalmente, el shawarma se realiza con carne de cordero, sin embargo, con la llegada de inmigrantes libaneses durante la década de 1920 a nuestro país, este famoso platillo se empezó a realizar con carne de cerdo y marinarse con abobo.
La carne aderezada con una mezcla de chiles rojos, especias y achiote, es acompañada de cebolla picada, cilantro y un pedazo de piña, dando como resultado el amado taco al pastor. Hoy en día es muy común encontrar este tipo de tacos en cualquier puesto callejero o restaurante de la Ciudad de México.
Dónde quedarte: Para los amantes de este platillo y que deseen conocer su verdadero origen, tienen como parada obligatoria: Líbano y hospedarse en Bzommar Palace Hotel, donde tendrán una vista impresionante de la bahía de Jounieh.
Además de contar con todas las amenidades, este alojamiento cuenta con un restaurante en el que los visitantes podrán degustar platillos internacionales hasta auténtica comida libanesa. Los huéspedes podrán relajarse en la piscina al aire libre o visitar la Gruta de Jeita o el santuario de Nuestra Señora del Líbano que se encuentran cerca del hotel.
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Papas Fritas – Brujas, Bélgica
Suaves por dentro y crujientes por fuera, ¿a quién no le encanta unas buenas papitas a la francesa? Si bien el nombre puede hacernos pensar que este clásico favorito fue inventado en Francia, los orígenes de este manjar están en Bélgica.
No es de extrañar que los viajeros puedan encontrar papas fritas crujientes caseras en casi todos los rincones de este país.
Cuenta la historia que el plato se inventó en Bélgica en el invierno de 1680 en Namur, la ciudad capital de la provincia de Valona, debido temperaturas heladas y que el río local estaba congelado, los habitantes de la ciudad tuvieron que comer algo diferente a su habitual pescado frito. La papa frita se volvió en la mejor alternativa y el resto es historia.
Si bien algunos historiadores han cuestionado la autenticidad de este cuento, Bélgica está convencida de que este platillo icónico se inventó en su país, incluso, exigió con éxito a la UNESCO que agregara el platillo a su lista de tesoros culturales en 2017.
El país también reclama el primer y único museo del mundo dedicado a las papas fritas: el Frietmuseum en la ciudad de Brujas.
Dónde quedarte: A pocos pasos del Frietmuseum, los visitantes pueden alojarse en el B&B Chester, un acogedor bed & breakfast con una decoración moderna.
Por su céntrica ubicación, es una estancia perfecta para que los huéspedes exploren más de los lugares destacados de la ciudad y prueben las mejores delicias de Bélgica más allá de las papas fritas, incluyendo cervezas belgas y chocolate belga, tanto con el Brujas Beer Experience y el Choco-Historia: El Museo del Chocolate, a solo unos minutos a pie.
La Dona – Atenas, Grecia
Azúcar y masa frita, ¿a quién no le gustaría una donita recién horneada? Conocida por su fama y popularidad en Estados Unidos, la historia de este fabuloso pan remonta varios siglos atrás. En realidad fueron los antiguos griegos quienes inventaron las primeras donas, también conocidas como loukoumades.
Estas esponjosas bolas de masa frita, cubiertas de almíbar o miel se entregaron originalmente como premios a los ganadores de los antiguos Juegos Olímpicos pero hoy en día se pueden encontrar en casi todos los rincones de la calle del país, sobre todo en la ciudad capital: Atenas.
Para probar los auténticos loukoumades y otras delicias locales, únete al Tour de comida y cultura de Koukaki y explora la ciudad mientras degustas una variedad de auténticos platos locales y golosinas con experiencias detrás de la mesa para saber cómo se crean estos platillos llenos de historia, cultura y tradiciones griegas.
Dónde quedarte: Ubicado en uno de los barrios más modernos de Atenas, el Heritage Hill Hotel es una estancia perfecta para los viajeros que prefieren estar fuera del ajetreo y el bullicio del centro de la ciudad, pero aún así estar cerca de lugares clave como la Acrópolis.
Este alojamiento está rodeado de muchas cafeterías, lo que la convierte en un lugar perfecto para disfrutar de un café acompañado de loukoumades recién hechos.
Croissants – Viena, Austria
Imagina degustar de un croissant mientras caminas por la Rue Rivoli camino al Louvre, claramente es una experiencia a la francesa. Aunque en realidad, los famosos “cuernitos franceses” provienen de un país distinto.
Originalmente, los croissants se inspiraron en la golosina austriaca conocida como kipferl, un rollo de pan de levadura tradicional que se enrolla y se forma en una media luna antes de hornear y que hoy en día se sirve como galleta.
El kipferl probablemente apareció por primera vez en Francia cuando se inauguró en 1838 la primera panadería vienesa de París. A los parisinos les encantó y como resultado comenzaron a hacer sus propias versiones. El kipferl se convirtió en francés en el momento en que se hizo con hojaldre inflado y nacieron los croissants que conocemos y amamos en todo el mundo.

Dónde quedarte: El Johannesgasse Apartments ofrece un alojamiento moderno y confortable en el centro de Viena, a pocos pasos de la catedral de San Esteban y la Ópera Estatal de Viena.
Los huéspedes podrán disfrutar de hermosas vistas del patio, mientras disfrutan de un desayuno recién hecho. Si bien los croissants recién horneados seguramente estarán en el surtido del especial desayuno para los huéspedes que deseen probar algo más “auténtico’, múltiples panaderías se encuentran en los alrededores donde se puede obtener fácilmente un kipferl austriaco, antes de subirse a una bicicleta para explorar la ciudad durante un Tour en Bicicleta Destacado de la Ciudad.